15.6.14

AUTOSABOTAJE


Han escuchado la frase “Mientras más conozco al hombre, más quiero a mi perro”?, que por cierto es muy discriminatoria esa frase y que admito que en algún momento lo creí (no hace mucho); hay una encuesta realizada en Gran Bretaña por una organización que protege a los animales (obvio), y que bueno que existen, ellos dicen que la frase en mención, cada día toma más fuerza y que muchas mujeres hoy en día prefieren a sus mascotas por encima de sus parejas, la encuesta fue realizada entre 2,000 (dos mil) mujeres, y demostró que 1 de cada 10 encuestadas afirman y sin lugar a dudas aman más a sus perros, a sus gatos, a sus pajaritos (los de plumas) y cualquier tipo de mascotas que a sus propias parejas, inclusive con parejas que llevan casadas más de veinte años. Más de la mitad de las encuestadas aseguró que busca la compañía de sus mascotas cuando están en discusiones con su pareja. Mientras, el 39 % de ellas admitió que sienten más afecto por sus mascotas cuando son ignoradas por sus novios.

Honestamente no sé qué pensar con este tipo de resultado, yo entiendo que hasta en las más perfectas relaciones, las mascotas suelen ser la compañía ideal para cuando hay momentos de discordia entre dos personas, pero llegar al punto de quererlas por encima de nuestra pareja? Sin duda creo que algo estamos haciendo mal, en algo la estamos regando, todos.
Creo que muchas de las relaciones humanas están en conflicto ahorita por el gran problema que tenemos de NO aceptar nuestros propios errores, que nos emperramos, nos emputamos, nos enfrascamos en discusiones tan estúpidas que se podrían arreglar con un “discúlpame, no hagamos más grande esto”, ojalá que tomemos la firme determinación de no hacer trascendente lo intrascendente, que es una costumbre terrible, espantosa y desgastante que tenemos todos los seres humanos, hacemos muy grande un problema o volvemos algo muy complicado cuando pudimos haberlo arreglado de una manera tan simple como un “tiempo fuera” “no quiero hablar de eso ahorita” “tuve problemas en el trabajo, deja que me dé un baño y luego hablamos”, eso como ayuda (y lo he entendido en los últimos días), ojalá y lo incluyamos (todos) como estrategia.

Por qué les comenté sobre esto? Bueno, este tipo de resultados es solo una pequeña muestra de cómo los seres humanos nos saboteamos nosotros mismos, nuestras relaciones de pareja, relaciones humanas, la relación con los hijos, el trabajo y siempre lo adjudicamos a la “salación” “mala suerte” “poca o mala comprensión de los demás hacia nosotros”, y no nos hemos dado cuenta que muchos de esos conflictos son productos de bloqueos, bloqueos internos y de eso es que quiero comentar en esta ocasión.

Habemos personas (si, me incluyo) que estamos bloqueando nuestro futuro, nuestro trabajo actual, nuestras relaciones humanas, bloqueamos inconscientemente, hasta nuestra propia salud. Este tipo de temas, para mi es reciente, y en el área psicológica está agarrando fuerza, porque cada día hay más personas que no logran lo que se proponen, precisamente por ciertos condicionamientos que traen a hombres y mujeres desde la infancia por problemas psicológicos, por afirmaciones, por decretos que les inculcaron en etapas cruciales de su vida, porque en el fondo de su corazón creen que no lo van a lograr y el miedo se hace presente y hacen un bloqueo (se friquean, como coloquialmente decimos), pero un bloqueo inconsciente “es que no, no me explico cómo me quedé dormido” “no entiendo cómo es que llegué tarde a mi cita de trabajo” “pero cómo fue posible? Si ya tenía todo listo para arrancar el negocio y me quedaron mal y desde allí se me saló todo”, bueno, fue culpa de un tercero? Fue por una inercia o una energía negativa? Una predisposición a que lo malo va a ocurrir?

Les daré algunos ejemplos de bloqueos internos o autosabotajes, que la gente me estuvo diciendo,  ya que hace unos días pedí opiniones y estuve conversando con unos amigos de que si sentían o adjudicaban a la “mala suerte” que mucho de lo que se han propuesto, programado o han deseado no se les ha dado, incluyendo las relaciones afectivas, los trabajos que decimos “me lo merezco y se lo dieron a otro”, estás esperando una llamada importante, de alguien que te va a cambiar la vida o va a mejorarla y exactamente ese día no encendiste el celular o peor te quedaste sin batería y dices “pero si yo lo cargué, no puede ser”; te preocupa tanto quedar bien con alguien y metes las patotas, en tu primera cita, te reíste tan fuerte que te salieron por la nariz unas secreciones (mocos) y “ay perdón, te lo juro que nunca me había pasado esto” y en efecto nunca te había pasado pero precisamente ese día te pasa, o el famoso “frijolazo”, te cuidas siempre no traer nada entre los dientes y el día más importante de tu vida, el frijolazo lo tuviste ahí presente todo el día hasta que llegaste a tu casa y te vas viendo en el espejo, simplemente te querías morir. Y ni qué hablar del área de la salud, estás en tratamiento médico y constantemente te olvidas de tomar los medicamentos; de dónde vienen todos esos bloqueos? Pero no, seguimos diciendo que es producto de la “mala suerte” “Dios la trae contra mí” “la gente es muy aprovechada y que me quita las oportunidades que eran para mí”, y la causa de todo esto es inconsciente, incluyendo cuando estamos a dieta, empiezas una dieta y se e aparecen todos los majares divinos habidos y por haber, todas las tentaciones, solamente falta que el pie de queso se te aparezca caminando frente a ti. En la salud lo tenemos a veces muy arraigado “cuando no me enfermo de una cosa, me enfermo de otra y me enfermo de otra y otra más”, y nosotros mismos nos estamos autosaboteando al preservar nuestra salud.

Ahora explicaré porqué sucede esto, y una amiga psicóloga y terapeuta me ayudó a descifrarlo, y que tiene raíces desde la infancia, está basada en una forma que tenemos o usábamos desde niños para defendernos ante las demandas de nuestros padres, imagínense desde cuando, y si no acostumbramos a dedicarle tiempo a la soledad, al silencio a la introspección no nos damos cuenta que nos estamos saboteando todo lo que verdaderamente necesitamos, a veces queremos agradar a los demás que nos olvidamos de agradarnos a nosotros, preocupados por el qué dirán.

Mi querida amiga y colaboradora en la mayoría de artículos que escribo me ayudó a desarrollar este tema tan raro, tan extraño, tan difícil de entender como los “bloqueos internos”, esos bloqueos que le ponemos incluso a eso que deseamos mucho pero que de tanto desearlo nuestro subconsciente actúa de tal manera que hace hasta lo imposible para que no logremos.

Tenemos trampas mentales que hemos hecho leyes en nuestra vida, todas esas experiencias que hemos tenido como el caso de una amiga o amigo que quiere casarse pero en algún momento de su vida tuvo una relación que fue muy dañina, ella/él ya se hizo esa creencia que el amor la/lo va a lastimar, los bloqueos siempre están originados por el miedo, miedo a repetir alguna experiencia anterior en la que nos fue muy mal y nos vamos protegiendo y desgraciadamente lo que más deseamos a veces es lo que más miedo nos da, entonces mucha gente como el caso de esta persona que van dos o tres relaciones fallidas está repitiendo patrones y de repente vuelve a caer en lo mismo de truncar nuestra meta o autosabotearnos; también hay personas que quieren conseguir algún trabajo, de hacer algún proyecto importante para su vida y de repente posponen, o llegan tarde y casualmente no era algo que quería que pasara y cómo puede ser que no llegue o que no se dé? Pues solitos estamos boicoteando esa meta por miedo; en aspectos de salud también nos boicoteamos y todo porque de niños éramos muy enfermizos nuestra querida madre se encargó “indirectamente” (porque ninguna madre lo hace de forma directa) de recordarnos que somos enfermizos, como el “ponte calcetas o zapatos porque el piso está muy frío y te vas a enfermar” “toma vitamina C siempre, porque siempre te enfermas” “no comas cualquier cosa porque te me enfermas a cada rato”, bueno, tiene tan metido ese bloqueo que siempre se enferma de todo.

Esta psicóloga recomienda 4 tips, para tener consciente el hecho de que nos estamos saboteando, que nos estamos bloqueando internamente, hay cuatro conductas que tenemos los seremos humanos en donde hay un foco rojo que nos está diciendo que probablemente tenemos un bloqueo interno:
  • 1.     No terminar las cosas. Empezar algo y dejarlo a la mitad, eso esta diciendo que estoy haciendo un autobloqueo a alguna parte de mi vida.
  • 2.     Posponer. Mañana lo voy a hacer, después, ahorita que tenga un tiempo lo hago! Posponemos todo lo que tenemos pendiente.
  • 3.     Cuando estamos en el “perfeccionismo”.  Revisamos tanto todo que no lo hacemos, no, hasta que quede perfecto, hasta que consiga todo esto, todavía no me queda bien, todavía no lo voy a mandar porque me faltan unos detalles. Vamos queriendo que todo queden tan “perfecto” que finalmente es una forma de bloquearnos también.
  • 4.     Poner excusas. No lo hago porque soy muy joven, porque soy muy viejo, mejor cuando adelgace, esas cosas ya no son para mí. Tenemos una meta o u deseo pero vamos poniendo excusas.


Si hacemos una de estas cuatro cosas, probablemente tenemos algún bloque interno.
Lo que se recomienda para poder “desbloquearnos” o dejar de sabotear nuestros deseos, nuestras metas es lo siguiente:

Antes que todo hay que ponernos pequeñas metas y pase lo que pase se tienen que cumplir. Para empezar a tomar autodisciplina y enseñarnos que no pasa nada he viendo que sí somos capaces de realizarlas, como desde terminar de pintar una pared que la queríamos verde desde hace un año pero que no lo hacíamos, tenemos que confiar en nosotros, tenemos que buscar esa “trampa” que nos tiene apurados ya sea en una relación amorosa o en un trabajo, hay muchas trampas o creencias como “yo no valgo” “no me merezco” “los demás van antes que yo” “yo no puedo” “esto es lo que me tocó vivir”; o sea, ver cuál es la creencia que nos maneja la vida anotarla y empezar a romper con ese tipo de creencias, visualizar cómo queremos ser y lo que queremos lograr, y de verdad ir por ello, enfrentar nuestro miedos, nadie puede bloquear nuestra acciones más que nosotros mismos y es que a veces nos la pasamos echándole la culpa a todo nuestro alrededor y no nos damos cuenta que inconscientemente nosotros nos estamos boicoteando todas nuestras metas por un miedo a sufrir o fracasar.
Este tipo de recomendaciones se me hacen tan valiosas, porque las personas a veces tenemos un vocabulario o una manera de expresarnos con autobloqueos, como “es que la vida es muy difícil” “acá, echando punta” “pues nada, acá, sobreviviendo” “aguantando a la familia” “pues bien, en lo que cabe” “sufriendo” que son frases que contestamos cuando nos preguntan ¿Cómo estás?, ese tipo de frases tienen mucho poder, y pueden ser autobloqueos que están impidiendo que logremos nuestras metas. Hay que cambiar nuestros pensamientos, repetir palabras positivas, pensamientos positivos, decretar todo el día y aprender a confiar en nosotros mismos.

Esto yo le he aprendido a lo largo de mi vida (corta o larga) y se los quiero compartir, las frases que yo he utilizado y han tenido resultados extraordinarios en mi vida son las siguientes:

·       Merezco la felicidad, estoy en paz, soy salud, soy armonía, merezco amor, el éxito es mío.

Palabras que trato decírmelas todos los días, y créanme que cuanto más las repito para mi, mucho mejor me va. 

Espero les pueda ayudar este articulo a tomar mejores decisiones, así como a mi me ayudó el realizarlo, si estamos detectando que se nos han “salado” muchos proyectos o nuestras relaciones "siempre son fracasos" y tememos que la próxima vez nos pase lo mismo, vamos, que ya lo dijo mi amiga (psicóloga y terapeuta), hacer un momento de introspección, de análisis para ver qué palabra, qué decretos, qué afirmaciones traigo tan arraigadas, mías o de alguien allegado a mí hace que sale todo lo que yo deseo incluyendo lo que para mí son relaciones importantes.


Hasta la próxima!




Nota: el link de abajo muestra el artículo que leí sobre la encuesta que originó todo este debate.


http://www.vanguardia.com/vida-y-estilo/galeria/235749-estudio-revela-que-una-de-cada-10-mujeres-ama-mas-a-su-mascota-que-a-su