14.11.14

Pero no te vas!

Inviertes tu tiempo apostando mi amor en algún billar, te gusta guardarme como “no contestar” en tu celular, y recordarme todo el daño que hace unos ayeres te hice….

Pides que no pinte mis labios de rojo quemado, dices que te gusta verme independiente pero que me quieres a tu lado, y jamás estás de acuerdo con mi siguiente partida. 

Repites mi nombre como si fuera tu palabra favorita, me dices que te hubiera gustado besarme en la primera cita. Te beso y me dices que es la última despedida.
Y no te vas.

Te dí más de lo que tenía, y sigues reprochándome que moriré con la sangre fría.

Me describes como radiante y dejas una carta que decía que no puedes más, que soy tu cáncer que te calcina.
Pero no te vas.

Y piensas bien en cómo mover tu ficha en el juego, besas mi frente de prisa como quién ya se quiere ir, pero regresas luego.
Me dices que si te lo pido, cambiarías.
Pero de tanto daño, de tantos, tantos años, ya olvidé como quererte.

Me adviertes que no regresarás, que entre tus planes no me contemplas.
Intentas sobornarme con que mis ojos ya no pueden jugar con tu mente, te digo que primero te convenzas a ti mismo, pues tu visita era una vez al mes y ahora, más frecuente.

Dices que sabes perder, que esta vez ya no vas a volver.
Pero no te vas.

A cada rato vuelves.